¡ Bienvenidos al Entorno Virtual de Aprendizaje del IBAN !

Nuestra visión

Construir un sistema educativo de excelencia con una infraestructura adecuada, garantizando los recursos económicos y de autogestión, con maestros de niveles de calidad académica y teológica, haciendo uso de una metodología actualizada para formar pastores, ministros, líderes y miembros de manera integral, es decir, competentes y éticos, en lo espiritual (teológico) secular y social, que como sujeto a cambio propicie la convivencia armónica con sus semejantes y con el medio ambiente (ecológico).

Nuestra misión

Formar a la iglesia, mediante un proceso educativo de calidad integral equitativo y permanente, conforme a los principios bíblicos, para que proclamen las buenas nuevas de salvación y regeneración de las personas que aceptan al Señor Jesucristo, como su salvador personal y que sean bautizados en su nombre, según la Biblia, los Estatutos y Reglamentos internos de la Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús.

El cuerpo ministerial

Creemos que el ministerio es un llamamiento de Dios y que el Espíritu Santo confiere a cada ministro la facultad de servir a la iglesia en distintas capacidades y con distintos dones cuyas manifestaciones son todas para edificación del cuerpo de Cristo (Ef.4:11-12; Lc.4:10; Sn Mt.4:18-20; 9:9; Heb.13:2-3). La palabra de Dios contiene suficientes enseñanzas sobre los requisitos que debe llenar la persona que vaya a servir en el ministerio y que corresponde a los gobiernos eclesiásticos debidamente organizados, examinar a los candidatos al ministerio y determinar cuando son dignos de aprobación y la tarea a que se deben dedicar (Hch.1:23-26; 6:1-3; 1Ti.3:1-10; 4:14; 5:22; Ti.1:5-9). El obispo es el encargado mas elevado en el ministerio y a quienes lo ocupan, se les debe dar muestras especiales de consideración y respeto, sin menoscabo de los que ocupan posiciones de menor responsabilidad.

Hay un solo Dios

Creemos que hay un solo Dios único e indivisible en su esencia y se ha manifestado al mundo en distintas formas a través de las edades y que especialmente se ha revelado como Padre en la creación del universo, como Hijo en la redención de la humanidad y como Espíritu Santo derramándose en los corazones de los creyentes (Génesis 1:1, Juan 1:1-3,14, 2 Corintios 3:17).